A lo largo de la geografía española, los pueblos tienen tradiciones que se mantienen con los años. Este es el caso de algunos pueblos cuya vinculación con el vino se pierde en el tiempo. Existen ciertos pueblos vinculados indudablemente al vino, de tal forma que no se entiende el uno sin el otro.
Cultivos, variedades de uva, pueblos, monasterios… es increíble la cantidad de elementos que están relacionados con el vino. Por ejemplo, hablar de La Rioja y no hablar de vino es casi impensable. Algo parecido pasa con el Monasterio de Santa María de Valbuena, para muchos el origen de la Ribera del Duero. Dos de las denominaciones de origen más importantes de España son Ribera del Duero y Rioja.
Dos pueblos claves en la Ribera del Duero.
En la Ribera del Duero existe el conocido ‘triángulo de oro de la Ribera’ formado por Peñafiel, Pesquera de Duero y Valbuena de Duero. Esto se debe a la alta concentración de bodegas de renombre en la zona.
PEÑAFIEL.
Es tal la vinculación de esta villa con el vino que su principal recurso turístico, el Castillo de Peñafiel, es hoy sede del Museo Provincial del Vino de Valladolid. La fortaleza se localiza en lo alto de una loma estrecha y alargada que le proporciona esta forma tan característica. El Castillo de Peñafiel fue declarado Monumento nacional en 1917. Diez años después, en 1927, un grupo de viticultores de Peñafiel fundan la Cooperativa Ribera Duero, origen de la D.O. creada en 1982. En Peñafiel destacan el Castillo de Peñafiel, la Plaza del Coso o el Convento de Santa Clara, declarados como Bien de Interés Cultural. Bodegas de renombre en Peñafiel son Protos (cuyo origen está en la Cooperativa Ribera Duero), o Pago de Carraovejas.
VALBUENA DE DUERO.
Posiblemente conocida por dar parte de su nombre a uno de los más afamados vinos de la Ribera del Duero, Valbuena de Duero es, sin duda, uno de los pueblos del vino más importantes de España. En esta localidad se encuentra el Monasterio de Santa María de Valbuena, de origen cisterciense. Para muchos este Monasterio es el origen de la Ribera del Duero, ya que en en torno al año 1155, los monjes llegan a Valbuena desde Francia y traen consigo nuevas variedades de uva y nuevos métodos de elaboración. La viticultura supone una de las principales actividades del Monasterio, hasta tal punto que la orden cobraba en vino parte de sus rentas.
Además del Monasterio, Valbuena de Duero cuenta con la Iglesia de Santa María la Mayor del Castillo, la Ermita de San Roque, así como uno de los arcos de la muralla de Valbuena que rodeaba la villa. En esta zona destacamos en Valbuena, Bodega Matarromera, Bodega Emina y Bodega Vega Sicilia.
Dos pueblos claves en la Rioja
Muchos dicen que La Rioja tiene nombre de vino. La D.O.Ca. Rioja, ha extendido tanto su nombre que a nivel internacional que muchos lo relacionan con el vino antes que con la Comunidad Autónoma. Hacer turismo en Rioja es todo un lujo para los sentidos. Su gastronomía y sus vinos son un patrimonio inmaterial que cada año atrae a más personas.
HARO.
Puede que sea una de las ciudades más hermosas de la Denominación de Origen. Está localizado a 41km de Logroño y es uno de los principales municipios en cuanto a industria vitivinícola. Su origen es anterior al siglo XI y en el XII hay documentos que lo relacionan con el vino . Ya en el año 1669 contaba con más de 100 bodegas. Un punto importante en el desarrollo vitivinícola de Haro fueron las plagas que atacaron varias zonas productivas de Francia, que posicionaron a La Rioja como centro de producción de vino. Muchos bodegueros vieron las posibilidades de la zona y terminaron instalándose en ella.
Alguno de sus principales atractivos turísticos son el Ayuntamiento, el puente de Briñas, la Iglesia de Santo Tomás, la basílica de Nuestra Señora de la Vega, el Convento de los Agustinos o las Plazas de La Paz y de La Cruz. En esta zona destacamos bodegas como Ramón Bilbao, Muga, Roda o Cvne .
SAN VICENTE DE LA SONSIERRA.
Esta localidad, situada a 35km de Logroño, es uno de los principales nucleos vitivinícolas de La Rioja. En ella se encuentran algunas de las bodegas más prestigiosas de la Denominación de Origen.
El principal recurso turístico de San Vicente, al margen del vino, es la iglesia gótica de Santa María la Mayor. El conjunto arquitectónico se cierra con el Castillo de San Vicente y la Ermita de San Juan de la Cerca. La Semana Santa tiene una larga tradición en San Vicente de la Sonsierra. Durante esta celebración, destacan ‘los picaos’: hombres con el rostro cubierto que se flagelan a lo largo de una procesión única en España. En esta zona destacamos Bodega Carlos Moro y Bodegas Sierra Cantabria.
Como conclusión, podemos terminar diciendo que el mundo del vino es la excusa perfecta para visitar no solo bodegas, sino pueblos y ciudades que tienen mucho que ofrecer al turista.
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