Es increíble la cantidad de factores que influyen en la elección de un vino a la hora de la compra. Aquí os nombramos algunos que consideramos los más relevantes.
- El tipo de vino. Lo primero que debemos tener claro es si queremos un vino blanco, rosado, tinto… En este sentido también influye el tipo de elaboración o el tiempo de crianza (queremos comprar un joven o bien un vino con más crianza…). A veces también sabemos qué variedad queremos (tempranillo, verdejo…).
- La Denominación de Origen. Las personas que vamos a comprar un vino normalmente tenemos una preferencia o idea establecida de la DO que estamos buscando: Rioja, Ribera del Duero, Rueda, Toro, Cigales… También es verdad que nos vamos volviendo más atrevidos y cada vez más, nos gusta probar marcas de calidad que no conocemos y dejarnos sorprender.
- Nuestra experiencia o la de alguien de nuestro entorno, bien si hemos probado previamente ese vino y nos ha gustado o bien si alguien cercano nos lo ha recomendado. Influye mucho el haber estado cerca del mundo del vino en catas, cursos de cata, visitas a bodegas, etc.
- El lugar donde esté ubicado en la tienda o supermercado así como diferentes exposiciones destacadas o promociones que pueda haber o bien las sugerencias del vendedor. Esto nos puede atraer e influir en nuestra elección.
- El precio, todos tenemos un precio máximo que nos gastaríamos en un vino y dependiendo de la situación, el día, el momento o la compañía en el que lo vayas a consumir dicha horquilla de precio variará en tu cabeza. También será distinto en el caso de si eres anfitrión o invitado, en esta ocasión tienes que pensar qué vino llevar.
- El nombre del vino, si es prestigioso y lo conoce la gente. Esto variará también en función de con quién vayamos a consumirlo, si es para nosotros o para regalar e, incluso, la época del año.
- La etiqueta. En el caso de que no nos suene el nombre del vino o la bodega elaboradora, es decir, la marca, puede que nos decidamos por un vino y no por otro por el diseño de la etiqueta, nos fijaremos en si es moderno, si es clásico y, dependiendo de cómo seamos nosotros o en qué momento de nuestra vida estemos, elegiremos uno u otro.
- La información de la contra etiqueta. En las últimas semanas hemos podido ver por Internet algunos ejemplos de contra etiquetas muy originales que han potenciado las ventas de ese vino. Independientemente de esto, en la contra etiqueta podremos encontrar información relevante que nos puede dar una idea de cómo será ese vino (meses en barrica, tipo de uva…). Generalmente en este tipo de información se fija la gente que tiene un mínimo conocimiento del mundo del vino pero también hay que decir que la cultura del vino poco a poco se va extendiendo.
- La botella. Bien por el diseño (forma) o bien por el contenido (formato). En este sentido, buscaremos una capacidad en función del número de personas que vayan a consumir ese vino.
Estos son los factores fundamentales, pero cada uno somos un mundo y si se te ocurre algún otro motivo por el que tú te “decantarías” (nunca mejor dicho) por un vino y no por otro, no dudes en compartirlo con nosotros y con el resto de los amantes del vino!!