Estos dos vinos de las bodegas Emina, de la D.O. Ribera del Duero, y Cyan, de la D.O. Toro, son dos vinos con muchos detalles en común. Ambos vinos son tintos crianzas que han descansado más de doce meses en barricas de roble francés y americano, en el caso del Emina Crianza han sido 12 los meses y en el de Cyan Crianza han sido 14. Ambos vinos proceden de bodegas ubicadas en zonas próximas al río Duero y nacidas bajo el paraguas de Grupo Matarromera. Los dos caldos estrenan unas etiquetas nuevas, acordes con la elegancia y la calidad que les caracterizan. Muchos son los puntos que tienen en común pero el terruño o terroir, es decir, el clima y el suelo de esas zonas determinadas hacen que sean vinos con peculiaridades totalmente distintas. El Cyan Crianza tiene la fuerza y potencia propia de los vinos de Toro y el Emina Crianza la persistente suavidad final que suelen impregnar los Riberas del Duero. En todo caso, son dos vinos perfectos para disfrutar, como decimos siempre mejor en buena compañía y siempre mejor con algo rico para acompañar que pueda maridar bien.
