A lo largo de toda tu vida, seguramente te hayas encontrado con situaciones similares a esta… Para esas veladas en las que hay varios vinos de distintos tipos sobre la mesa, puede surgirnos la duda: ¿En qué orden deben servirse los vinos? ¿Qué vino sirvo primero, el blanco o el tinto? Pues hoy vamos a contestar a estas y otras preguntas.
Al margen de los maridajes que vayan a disfrutarse en una comida o cena, pueden surgirnos dudas sobre el orden en el que deben servirse los vinos. Hoy vamos a establecer unas normas básicas que te van a venir muy bien y con los que acertarás seguro.
Reglas básicas sobre el orden del vino.
En términos generales podemos atender a dos normas básicas que nos pueden servir como referencia.
Si atendemos al tipo de vino, primero deberían servirse los vinos blancos, posteriormente deberíamos seguir por los rosados y por último, terminar con los tintos.
En cuanto a la crianza, también debemos ir de menos a más. Esto es, primero deberíamos servir los vinos con menor crianza o sin crianza para terminar con los vinos con mayor crianza.
Por último, según el grado alcohólico debemos seguir la misma regla. Primero serviremos los vinos menos alcohólicos y terminaremos con los de mayor graduación.
Primero blancos, luego rosados y por último los tintos
Tal y como hemos visto antes, el orden en el que deben servirse los vinos sigue una serie de parámetros que, si unificamos nos darán este orden.
- VINOS ESPUMOSOS. Por raro que parezca, los primeros vinos deberían ser los espumosos. Son vinos generalmente blancos, de poco grado alcohólico y sin crianza. Además este tipo de vinos maridan perfectamente con entrantes, pescados y aperitivos. Este tipo de vinos no es únicamente válido para terminar una comida y brindar.
- En este punto te podemos recomendar nuestro Emina Verdejo Espumoso Brut Nature (D.O. Rueda).
- VINOS BLANCOS LIGEROS. Son vinos blancos ligeros de poco grado alcohólico que deben continuar el orden de servicio. Su maridaje es perfecto con quesos, aperitivos y verduras.
- Nuestra recomendación es Casar de Vide Treixadura (D.O. Ribeiro).
- VINOS BLANCOS CON CUERPO. Nos gusta definirlos como vinos blancos con alma de tintos, y es que además, se sitúan a medio camino de ambos. Su maridaje es bueno con pastas y arroces.
- En este punto nos encontramos con Matarromera Verdejo Fermentado en Barrica (D.O. Rueda).
- VINOS ROSADOS. En el centro de la lista encontramos vinos en los que la uva tinta ya comienza a hacer acto de presencia. Podemos encontrar vinos monovarietales tintos o coupages entre variedades tintas y blancas. Su maridaje también es bueno con pastas y arroces.
- Te recomendamos Valdelosfrailes Rosado (D.O. Cigales).
- VINOS TINTOS LIGEROS. Vinos tintos jóvenes y con media crianza se situarían en este punto y su maridaje puede ser con ibéricos, embutidos, y carnes blancas.
- Melior de Matarromera Tempranillo (D.O. Ribera del Duero) es una excelente opción.
- VINOS TINTOS CON CRIANZA. Tras los robles, llega el turno de los vinos con crianza, con una mayor potencia y grado alcohólico. En este punto situaríamos a vinos que van perfecto con guisos, asados, carnes rojas.
- Vinos como CM Prestigio (D.O.Ca. Rioja) son perfectos llegados a este punto.
- VINOS TINTOS POTENTES. Con un maridaje similar podemos encontrar los vinos más potentes. También puedes atreverte a maridarlo con chocolate negro.
- El elegido podría ser Cyan Prestigio (D.O. Toro).