Estos días se multiplican las comidas, cenas, compromisos y demás brindis con familiares y amigos. Seguro que todos tenemos a alguien cercano que no bebe o bien que no debe o puede beber alcohol. En esos casos, el brindis se convierte en una situación un tanto incómoda entre las copas de agua, las miradas de “brindar con agua trae mala suerte”, las frases en ocasiones un tanto engañosas de “no, si es solo para mojarme los labios…”. Todo esto podemos evitarlo si tenemos un vino sin alcohol, y más si es un espumoso sin alcohol, ideal en estas fechas Navideñas y más de cara a esta Nochevieja.
Pero es que, además, en todas las comidas o cenas suele haber alguien que no bebe alcohol, así que si llevas una botella de vino sin alcohol seguro que hay alguien que te lo agradece y, en el caso de que seas tú la persona que no bebe alcohol, no dudes en atreverte pero ten cuidado no te salgan muchos seguidores, con la excusa de probarlo seguro que se acaba antes de lo que pensabas.
El vino sin alcohol ha sido vino, de hecho es un vino desalcoholizado a través de un complejo proceso realizado en una planta de deconstrucción molecular ubicada en pleno corazón de la Ribera del Duero, concretamente en Valbuena de Duero. Los vinos son de Grupo Matarromera, marca que asegura la calidad de los mismos. Mediante ese proceso, que tardaron años en investigar para obtener la patente europea, se consigue extraer el alcohol dando como resultado una bebida refrescante, que mantiene las propiedades beneficiosas del vino pero sin alcohol, con lo que tiene también muchas menos calorías. Win es, en definitiva, una bebida saludable con la que todo el mundo puede brindar y que además cuenta con una gran diversidad de opciones para todos los gustos, desde blancos, rosados, tintos, tintos con crianza en barrica, espumosos, así como otros que son frizzantes, bien sea con 5.0 grados de alcohol o con 0.0%. Sea como sea, esta vez sí que sí, seas como seas, chinchín, brinda sin alcohol con Win!
