¿Alguna vez te has preguntado si existe un tipo de copa para cada tipo de vino? Hoy vamos a responder a esta cuestión. No todos los vinos se disfrutan igual en distintas copas de vino, ¿lo sabías? Hay ejemplos claros, como las copas de espumoso, que todos somos capaces de diferenciar, pero si hablamos de vinos blanco y vinos tintos… ¿Sabías diferenciarlas?
Te lo prometimos en el capítulo 6 de ‘La Esencia del Vino’ y aquí está. Algo a lo que estamos más o menos acostumbrados es a ver varios tipos de cubiertos sobre la mesa, tenedores de carne, cucharas de postre, paletas de pescado… Pero, ¿y las copas de vino? No todas las copas son iguales, y hoy te vamos a explicar el porqué.
Copas de espumoso
Vamos a empezar por lo más fácil, todos diferenciamos fácilmente las copas de espumoso. Son copas más altas y estilizadas. ¿Sabes por qué tienen esta forma? Son especiales para conseguir que haya una poca cantidad de vino en contacto con el aire, así conseguimos mantener la espuma, la temperatura y, sobre todo, las burbujas (muy importantes si hablamos de vinos espumosos.
- FLAUTA. La copa más común es la flauta. Muy alta y casi recta.
- TULIPÁN. Es una copa un poco más abierta que se cierra inmediatamente en la parte superior (similar a un tulipán).
- POMPADOUR. Es una copa clásica que ahora está algo en desuso. Es una copa muy baja y ancha.
Sobre la copa Pompadour existe una leyenda. La primera copa de este tipo se fabricó en porcelana en el siglo XVIII usando como molde el seno izquierdo de María Antonieta, esposa del rey Luis XVI. Lo más curioso es que recibe el nombre de Madame de Pompadour, una de las amantes de Luis XVI…
Copas de vino tinto
Las copas de vino tinto son cada vez más grandes y, sobre todo, más anchas. Esto es para conseguir que el vino se abra con mayor facilidad. En el caso de copas de vino tinto también encontramos distintos tipos.
- BORGOÑA. Es una copa barriguda de cuello ancho. Es ideal para hacer girar el vino en su interior, es perfecta para vinos más complejos que es necesario catar pacientemente.
- BURDEOS. Similar a la borgoña pero más alargada, algo más versátil ya que es buena también para vinos con menos crianza.
Copas de vino blanco
También diferenciamos las copas de vino blanco.
- CHARDONNAY. Muy similar a la burdeos pero más pequeña, ya que la cantidad de vino blanco que debe servirse es menor a la cantidad de vino tinto. También es ideal para vinos rosados por esta misma razón.
- RIESLING. Similar a la tulipán de los espumosos, ideal para catar vinos blancos y rosados muy aromáticos, ya que su diseño permite capturar los aromas.
2 Comentarios
Muy buen artículo, bien explicado y con fundamento. Para mi gusto la copa que mejor se adapta a cualquier variedad de vino es la Burdeos. ¿Qué opináis vosotros?
Si, estamos de acuerdo, es un tipo de copa que por su forma y características la hace muy versátil.
Muchas gracias por tu comentario.